domingo, 10 de enero de 2010

La pregunta es : ¿ y cómo no querer a Mérida?

Por José Miguel Vera Badias

Hace apenas dos días que celebramos un cumpleaños más de nuestra Mérida, y hace apenas unos cuantos que existe una campaña de esas electoreras llamada: "Mérida cómo te quiero", ésta campaña está tambien en el ávatar tecnológico del internet. merodeando por estos lares infinitos del facebook, me topé con un grupo de jóvenes que se convertían en admiradores de la mentada estrategia electoral.

fué curioso porque muchos de ellos comentaban cosas tan distantes entre correligionarios. unos sólo proclamaban su orgullo por ser meridanos, mientras otro decía que esta ciudad era la mejor para vivir, y que es tiempo de que cambie. es evidente que el joven, autor de la citada frase se encuenta contrariado en el orden de sus ideas.

más allá de una reflexión precisa de los decires de aquellos chavos, quisiera escribirles sobre el pensamiento que cruzó inmediatamente por mi mente. más bien fueron dos y el primero fué una pregunta: ¿ y cómo no quererla?, ¿cómo no hacerlo como meridano que soy, que somos todos?. me pareció una obviedad y un eufemismo: cómo no quererla cuando las gentes de otros estados e incluso de otros paises, anhela nuestras calles, nuestra gente cálida y apacible, ni qué decir de nuestra historia que no cabe en las bibliotecas ó de la seguridad con la cual los ciudadanos de Mérida nos jactamos de vivir. en pocas palabras, anhelan nuestro altísimo nivel de vida.

por un momento me ofuscó la idea de que aquellos que siempre fueron defensas del retroceso y frenos del cambio hoy se llenen la boca de un cariño profano por esta ciudad y aún más me molestó la posibilidad de que muchos jóvenes que no vivíamos para ese entonces puedan pasar por creíble aquella falacia. hice una pausa, y caí en cuenta de algo, ese "algo" es el motivo de estas lineas madrugadoras y me gustaría poder contagiarlos: ¿producto de qué otra cosa puede ser estos comentarios desanfadados, desatinados y extraviados sino de EL RESULTADO DEL TRABAJO MÁS QUE SATISFACTORIO REALIZADO POR LAS ÚLTIMAS ADMINISTACIONES MUNICIPALES?

nos podríamos quedar con la sensacíon de que lo anterior no representa otra cosa que nuestro acabose, sineramente yo considero que esta debe ser nuestra bandera, nuestro sello personal que acompañará al futuro de Mérida representado por sus jóvenes y mejor aún; que los podrá beneficiar.

Aquellos podrán seguir mascullando su "cariño" por esta ciudad, mientras nosotros trabajaremos por Mérida, veremos lo que menos nos gusta de ella, y trataremos de transformarlo.


el "cariño" podrá permear siempre dependiendo de los resultados electorales,
pero el AMOR NO, y que quede claro: ¡que es AMOR lo que sentimos por Mérida!

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